No es extraño que nos hagamos la pregunta ¿Quién soy?, incluso en muchas entrevistas de trabajo nos hacen el siguiente cuestionamiento ¿Cómo te defines o describes?, para estas oportunidades solemos tener un grupo de respuestas prediseñadas, me defino como una persona trabajadora, puntual, comprometida, y si nos preguntan por nuestros defectos incluso decimos “soy muy perfeccionista”, pero es lo que realmente pensamos de nosotros.

Nuestra identidad va más allá de una entrevista laboral e incluso de lo que otros piensen de nosotros, saber de dónde venimos, cuáles son nuestras fortalezas, debilidades, e innumerables experiencias, nos van a ayudar a conformar una definición, para que poco a poco vayamos respondiendo la pregunta ¿Quién soy?, aunque si les soy sincera, muchos aspectos van cambiando en el tiempo, por lo que podríamos decir que nunca será respondida del todo.

Parece existir cierto consenso respecto a que la autoestima es un juicio personal acerca de la propia valía, una valoración global de aceptación o rechazo hacia uno mismo, caracterizado por una estabilidad considerable de una situación a otra, incluso de un año a otro.

Esta valoración viene dada por nuestras exigencias, lo que esperamos de nosotros, hasta qué punto nos creemos importantes, exitosos, valiosos o capaces de algo.  No se trata sólo de autoevaluaciones momentáneas o circunscritas a una situación, sino al sentido general que desarrollamos las personas respecto a nosotras mismas.

¿Cómo saber si tengo baja autoestima?

Muchas veces nos damos cuenta de que no nos sentimos bien con nosotros mismos, pero no identificamos las razones que nos hacen sentir así. Parte de poder mejorar es reconocer aquéllas cosas que nos incomodan y buscar nuevas alternativas.

Aspectos que nos pueden alertar de la presencia de baja autoestima:

  1. Inseguridad: al dar mi opinión o tomar una decisión.
  2. Miedo: a ser juzgado, a equivocarme, a decir lo que pienso o a intentar cosas nuevas.
  3. Inconformidad: pensar que nunca mis logros son suficientes, juzgarme por mis decisiones o acciones, creer que poseo más aspectos negativos que positivos, y compararme con los demás.
  4. Desvalorización: tener pensamientos como no merezco las cosas buenas de la vida, no soy bueno para nada, siempre me equivoco.

¿Cómo mejorar mi autoestima?

Intentar aumentar la autoestima no es tarea sencilla, su dificultad radica en descubrir todo nuestro potencial, por esto es importante que empecemos a conocernos mejor, y podamos poco a poco encontrar aspectos positivos que nos gusten. 

Sugerencias para mejorar mi autoestima:

  1. Evitar pensamientos negativos y fomentar los positivos, entender que nos podemos equivocar, evitando reprocharnos constantemente, y cambiar estas críticas por frases como: lo voy a lograr, voy a tener éxito, todo saldrá bien.
  2. Tener expectativas realistas: las metas que nos proponemos deben ser realizables, por lo que es imprescindible tomar en cuenta distintas variables, como las económicas, temporales, o recursos, eso evitará que nos frustremos.
  3. Considera los errores como oportunidades: el aprendizaje nunca acaba, así que si algo sale mal encuéntrale el lado positivo y aprende de eso.
  4. No te compares: todos somos diferentes, nunca vas a ser igual a los demás por lo que el compararte solo te va a hacer sufrir, y va a evitar que encuentres tu propia manera de hacer las cosas. En la actualidad las redes sociales nos hacen difícil esta tarea, sin embargo, debemos recordar que las personas por lo general publican únicamente los fragmentos de su vida que los harán lucir más exitosos o felices, evitando hacer públicas las situaciones que los expongan a las críticas o que afecten la imagen que desean proyectar.  
  5. Quiérete y confía en ti: realiza actividades que te motiven, asiste a eventos o reuniones, exprésate.
  6. Descúbrete: experimenta distintas actividades para hallar nuevos aspectos de ti mismo. Darse la oportunidad de experimentar cosas nuevas puede tener efectos positivos, ayudándonos a redescubrirnos y reinventarnos.

En este punto te recomiendo que leas sobre dos excelentes disciplinas, Belén Guerra, quién nos habla de Yoga, y Angelica Perilla sobre Pilates, quizás estas actividades puedan ser un excelente punto de partida para descubrirte.

Si tu baja autoestima te está afectando significativamente en diversas áreas de tu vida, sueles tener pensamientos negativos que no puedes controlar, es importante que acudas a un profesional quien te acompañará en tu proceso de autodescubrimiento y cambio.

Referencias

Caballo, V. E., Piqueras, J. A., Antona, C., Irurtia, M. J., Salazar, I. C., Bas, P., y Salavera, C. (2018). La autoestima y su relación con la ansiedad social y las habilidades sociales (No. ART-2018-105830).

McKay, M., & Fanning, P. (2019). Autoestima: Cómo evaluar, mejorar y mantener una sana autoestima. Editorial Sirio S.A.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *